El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó a James Comey este viernes como una “bola de baba débil y falsa” y un “FILTRADOR Y MENTIROSO” probado, un día después de que extractos explosivos del revelador libro del exdirector del FBI aparecieron en medios de comunicación.
“James Comey es un filtrador y mentiroso probado. Prácticamente todos en Washington pensaron que debería despedirlo por el terrible trabajo que hizo hasta que, de hecho, fue despedido. Filtró información CLASIFICADA, por lo cual debería ser procesado. Le mintió a Congreso bajo JURAMENTO”, tuiteó Trump. “Es un balón de baba débil y mentiroso que, como ha demostrado el tiempo, fue un terrible director del FBI. Su manejo del caso de la corrupta Hillary Clinton, y los eventos que lo rodean, pasarán a ser uno de los peores” trabajos de chapuza “de la historia. ¡Fue un gran honor despedir a James Comey!”
El libro de Comey, A Higher Loyalty, de cuya copia obtuvo CNN, detalla sus conversaciones con el presidente, compara a Trump con un jefe de la mafia y critica el “incendio forestal que es la presidencia de Trump”.
Comey testificó en junio que dio algunos de sus memos de conversaciones que tenía con Trump a un profesor de la Universidad de Columbia y que había escrito los memorandos específicamente para evitar incluir información clasificada.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, también atacó la credibilidad de Comey el viernes.
“Una de las pocas áreas del verdadero consenso bipartidista en Washington es que Comey no tiene credibilidad”, escribió Sanders en Twitter el viernes por la mañana.
Su publicación también incluyó el enlace a un video del Partido Republicano titulado “Comey no tiene credibilidad, pregunta a los demócratas”.
La consejera de la Casa Blanca Kellyanne Conway el viernes también criticó al exdirector del FBI.
“Encontramos que el señor Comey tiene una visión revisionista de la historia y parece un exempleado descontento”, dijo Conway a periodistas fuera de la Casa Blanca.
Los aliados de Trump han preparado una extensa campaña para luchar contra la gira publicitaria de Comey, tratando de socavar su credibilidad al revivir las ampollas críticas demócratas sobre él antes de ser despedido hace casi un año.