Por Román Martínez
Cancún.- El subsecretario de Relaciones Internacionales de la CROC, Salim Calcah Navarro, afirmó que tenemos en México un serio problema porque las pensiones ya no las gozarán todos los trabajadores, quienes van a sufrir son los que forman parte de la generación Afore, que son todos los trabajadores que nacieron en el año de 1981 en adelante.
“En los últimos estudios de CONSAR hay un voz de alarma que dice que muchos de estos trabajadores no van a tener derecho a una pensión digna, es un reto que implica tomar decisiones a la brevedad, como estructuras sindicales, porque en todo el país se debe de pensar qué va a pasar con las pensiones”, señaló.
Agregó que la razón principal son las semanas cotizadas; “deben de ser mil 250 semanas con la nueva ley de Seguridad Social y muchos de los trabajadores no las van a alcanzar, por las crisis y porque los trabajadores pasan de la formalidad a la informalidad muy rápido, porque en la informalidad a veces se gana más que en la informalidad, además de que los salarios, en general son muy bajos”, dijo.
Precisó que el 90% de los trabajadores de la generación AFORE, que son 31 millones de cuentas en México, solo uno de cada 10, gana menos de cinco salarios mínimos, la mayoría está en 12 mil pesos mensuales para abajo, el 90%, y los que tienen el 65 años y más reciben 600 pesos como ayuda mensual, son alrededor de cinco millones de personas.
Agregó que hay tres millones de jubilados del IMSS e ISSSTE que reciben un promedio de cinco mil 600 pesos al mes, por ello, hay que preguntarle a los candidatos a la Presidencia, cuál es el plan, porque nadie ha hablado de este tema tan delicado, porque estamos en un 50% de informalidad y 50% de formalidad.
El entrevistado aseguró que en nuestro país el 46% tiene un trabajo formal, de son un promedio de 30 millones en la formalidad y 25 millones en la informalidad; “en América Latina son 170 millones de trabajadores en la informalidad”, expresó.
Salim Calcah concluyó al declarar que el gobierno se comprometió a regularizar prestaciones a favor de las trabajadoras domésticas, que son otro sector desprotegido, que abarca dos millones de “trabajadoras del hogar, que no tienen seguridad social, que es una obligación de acuerdo a la ley, tema que sigue pendiente y nadie lo quiere asumir”.
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