La Amegas señaló que no existe certeza en el volumen que se transporta en pipas y se despacha a los consumidores finales.
La Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas) acusó este lunes a dos instancias gubernamentales de actuar con omisión ante la comercialización de combustible robado, al tiempo que lamentó la excesiva regulación a la que están sometida las estaciones de servicio en el país, que pone en riesgo su existencia.
En un comunicado, la Amegas culpó a la Comisión Reguladora de Energía y a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) de “no emitir durante cinco años de gestión las disposiciones técnicas, reglamentarias y de regulación para una adecuada administración de la integridad de los ductos y poliductos que transportan a través de 11 mil kilómetros los petrolíferos, gasolinas y diésel de producción nacional y de los importados”.
Ambas dependencias, agrega el texto, han cometido claros desaciertos y promueven “una regulación amañada contra el sector gasolinero”, al tiempo que dejan “los mismos sistemas de control, administración y desarrollo de toda la cadena productiva del petróleo”, lo que impide acabar con el llamado ‘huachicoleo’.
En el caso específico de la CRE, denunciaron también una actitud pasiva al no emitir normas oficiales para regular el transporte y despacho de combustible, impidiendo con esto medir correctamente el volumen de gasolina y diésel en las pipas que salen de las terminales de almacenamiento hacia las estaciones de servicio, una situación que afecta principalmente al consumidor final.
Toda esta situación, remata la Amegas, constituye “una traición a la Patria” pues sólo se busca “liquidar las 12 mil gasolineras de México, con el fin de entregárselas como chatarra a los extranjeros”.