Luego de ver a Luis Miguel caer en varias situaciones donde parece que las cosas se salían de control, en el sexto capítulo de la bioserie vimos a un Luis Miguel tratando de enmendar sus recientes fallas.
Luismi pasa de ser el fiestero con cruda interminable a un joven más consciente, que se da cuenta de los recientes daños que había ocasionado mientras intenta filmar el video del éxito ‘La Incondicional’.
Asimismo, aprendimos más sobre las prácticas poco éticas de su padre, Luis Rey, quien es mostrado, prácticamente, como un explotador de menores.
La serie confirma que Luis Rey quería tener a Luis Miguel trabajando todo lo que pudiera desde pequeño: grabando películas por el día y por la noche ofreciendo conciertos; pero el niño comenzó a agotarse y a fallar en su desempeño, así que Luis Rey convence con dinero a un médico para que le suministre al pequeño efedrina.
La sustancia funciona para estimular el sistema nervioso central y puede aportar energía extra, sin embargo, puede generar insomnio, arritmia cardiaca y dolores de cabeza.
En la serie, Luis Rey ignora las advertencias sobre el agotamiento del niño y amedrenta a todos los que advierten la situación, incluída la madre de Luis Miguel.
Lo abusos no terminaron en la infancia. Poco a poco hemos visto cómo las mentiras y abusos de Luis Rey hicieron que tanto su esposa como sus hijos, Luis Miguel y Alejandro, se alejaran de él. Seguro en los siguientes capítuos descubriremos más cosas que nos harán decir: te odiamos, Luisito Rey.