Por Román Martínez
Cancún.- José Oswaldo Asencio Vaca, quien lleva 20 años en Cancún y se gana la vida vendiendo tamales a 15 pesos, acudió a las oficinas de los regidores, para que lo ayuden, porque los policías no le permiten comercializar sus tamales torteados, de pollo, en las calles, lo han amenazado de levantarlo y eso lo está afectando.
El entrevistado dijo que diario vendía 60 piezas, que le dejaban 300 pesos de ganancia, ya sacando los gastos; “ahorita ya no hay gente en la calle; la policía está restringiendo la venta, ya no quieren que la gente salga; estamos en banca rota, no tenemos víveres, ni nada”, señaló.
Precisó que sus tamales los comercializaba en la calle y donde podía, tiene dos hijos que mantener, a su esposa y una persona de la tercera edad, con él son cinco bocas que mantener, es el sostén de esa familia, por lo que el llamado a las autoridades es que apoyen a la gente que va al día.
Señaló que en su desesperación, fue a ver si algún regidor (en oficinas que se ven vacías) le echa la mano, para tener algo de sustento para su familia; “buscó a las regidoras Anahí y Jacqueline y al regidor Lozano, pero ahorita no hay ninguno que nos pueda atender; no pedimos economía sino víveres”, afirmó.
Destacó que el Gobernador dijo que se suspende el pago de luz y agua, no saben si es verdad o mentira, porque si les exigen eso pagos sería terminarlos de matar; “y eso va a provocar que la gente se alborote y haya saqueos, como en el D.F.; la necesidad obligará a la gente a buscar víveres y despensas, para que no empiecen los robos”, concluyó