SOLO EL 50 POR CIENTO DE LOS CASOS, REGISTRADOS OFICIALMENTE, HAN SIDO DENUNCIADOS ANTE LA FISCALIA
Sólo el 50% de los taxis robados y que se tiene conocimiento oficialmente, han sido denunciados ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, de los cuales en un 40% de los casos han sido con violencia, por lo que además de despojar de sus pertenencias al operador se adueñan del vehículo para cometer algún ilícito, en la mayoría de las veces, declaró José Manuel Canto Rodríguez, Sub Secretario de Conflictos del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”.
El directivo dijo que de enero a noviembre del año en curso se registraron oficialmente 120 robos de taxis, pero sólo en la mitad de los casos fueron denunciados ante la Fiscalía, de los cuales un 30% han sido recuperados.
Sin embargo, Manuel Canto, sostuvo que en el otro 50% de los casos, que fueron reportados ante esta Secretaría de Conflictos, no se procedió legalmente para iniciar la carpeta de investigación ante las autoridades, porque los vehículos fueron recuperados por la policía o por el personal de vigilancia de este sindicato en menos de 24 horas y los dueños de los vehículos prefirieron evitar el trámite burocrático.
En este sentido, Canto Rodríguez, subrayó que en los meses de octubre y noviembre se tuvo conocimiento extraoficialmente de robos a taxis hasta de 3 a 5 unidades diariamente, los cuales se presume fueron usados “ipso facto” para cometer algún ilícito porque horas después fueron encontraron abandonados en áreas verdes en distintos puntos de la ciudad, mismos que presentaban algún choque menor en su carrocería, con los números económicos alterados parcialmente (clonados) y, en el menor de los casos, completamente desmantelados.
Finalmente, Manuel Canto explicó que los taxis que aún están desaparecidos fueron rehabilitados por los socios concesionarios con vehículos de modelos recientes y hoy circulan por la ciudad prestando el servicio de ruletero, lo cual no significa que tengan que estar “boletinados” ya que cuando se roban el vehículo son las placas de circulación las que son dadas de baja ante la Recaudadora de Rentes, más no así el número de concesión otorgado por el gobierno.