El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, externó que su país“no será un país de refugiados”, porque los extranjeros pueden ser “asesinos, ladrones y muchas cosas más”.
Trump continuó con su discurso xenófobo y criticó a países europeos por aceptar a inmigrantes que muchas veces huyen de sus países porque corre peligro su vida.
“Estados Unidos no será un campo de inmigrantes y no será un campo de acogida de refugiados. Lo que está ocurriendo en Europa y otros lugares, no lo permitiré, no bajo mi vigilancia”, dijo el mandatario.
Estas declaraciones surgen después de que se difundiera un video sobre migrantes menores de edad encerrados en jaulas que fueron separados de sus padres o acompañantes por no entrar con papeles a territorio estadounidense.
Estos lugares son los centros de detención de la Patrulla Fronteriza. El video difundido ayer corresponde al que está en McAllen, Texas, donde se puede oír a los niños llorar y pedir que los lleven con sus padres.
La secretaria de Seguridad Interna de Estados Unidos, Kirstjen Nielsen, reforzó el mensaje de Trump y dijo que su país no pedirá disculpas o cederá porque están haciendo su trabajo.
“No podemos detener niños con sus padres. Debemos liberar a padres y niños… o debemos separarlos para poder procesar a los adultos”, justificó la funcionaria.
Entre el 5 de mayo y 9 de junio, 2 mil 342 menores de edad fueron separados de su familia al ingresar ilegalmente a Estados Unidos, indican datos del Senado.