El Gobierno mexicano libra una batalla contra la industria tabacalera. Entró en vigor la prohibición de la publicidad, la exhibición y el consumo de tabaco en algunos espacios libres, por lo que se prevé una “lluvia” de amparos para poder detener la regulación del tabaco, ya que daña la competitividad y al sector empresarial.
Es necesario que la Federación, en este caso la Secretaría de Salud, escuche las afectaciones que se estarán presentando en el sector restaurantero y hotelero, sobre todo que Quintana Roo es un estado netamente turístico.
Empresarios dicen que la regulación es otra señal de falta de incertidumbre jurídica y de violación a los derechos y libertades de las empresas e individuos, ya que el tabaco es un producto totalmente legal en México y su comercio no debe ser estigmatizado.